martes, 20 de marzo de 2012

Ratón y las señoras

Tengo esa particularidad. Las señoras (muy mayores) vienen a coquetearme. Les voy a poner un ejemplo que ocurrió hace no más de una hora:

Lugar: Rotisería de comida china-vegetariana-abraza arboles-etcétera.
Hora: Mediodía.
Situación: Ratón haciendo la fila.

Miraba cómo la gente se peleaba por el último arrolladito primavera que no está relleno de acelga (nadie sabe qué tiene en realidad), cuando una señora de pelo blanco con aspecto de setenticortos me toma el brazo.
-Pibe, dejame colarme. De última decimos que soy una vieja retrasada.-
-Cuelesé tranquila, señora.- Mi cara no dictaba felicidad o enojo. Solamente una seriedad de "cosas que pasan".
-Gracias nene. Pero ponete un poquito más feliz, viste. Dejame colarme con una sonrisa tuya aunque sea. Dale que en unos años me voy al cajón...- dijo, con cara de resignación
-Ey! señora, no diga eso... le quedan AÑOS de joda!-
-Ah, si? quién va a sacarme de joda? vos?-
-No señora, yo estoy pobre. De hecho, hago que las chicas me inviten.-
-No te hagás el canchero, nene!-
-No! Es verdad! sinó, solo comería una comida diaria!-
-Bueno, es que tenés una linda sonrisa- Para este momento, nos estábamos riendo ámbos.
-Ahhh gracias!-
-...y un lindo culo!- y tiró la cabeza para mirármelo.

Para todo esto, ya había que pagar. Estaba en camino a hacer pagar mi comida a la señora, pero con esto del culo, se lo perdoné.